Nuestra carrera de Agronomía y Negocios ha desarrollado un proyecto con la Municipalidad de Mala para el fortalecimiento de las capacidades de agricultores productores de banano del distrito. Este proyecto se alinea con nuestras iniciativas de Responsabilidad Social Universitaria (RSU), donde buscamos impactar de manera directa en comunidades que requieren apoyo técnico y académico.
Este proyecto, iniciado en el semestre 2023-2, tuvo como objetivo principal fortalecer las capacidades productivas de los agricultores locales, con un enfoque especial en el cultivo de plátano de isla, un producto clave para la economía de la comunidad de Mala. Nuestra meta fue clara: a través de la transferencia de conocimientos y la asistencia técnica, promovimos prácticas agrícolas sostenibles que no solo beneficiaron a los productores, sino que también contribuyeron a la conservación del medio ambiente y al bienestar de los consumidores. De esta manera, todo ello se encuentra alineado con el enfoque nuestra área de RSU.
Este proyecto incluyó visitas a la comunidad en septiembre, octubre y noviembre de 2023. Además, realizamos una última visita a finales de julio de este año para evaluar la efectividad del asesoramiento proporcionado. En cada una de estas visitas, un equipo conformado por 15 estudiantes, dos docentes y un egresado de la carrera de Agronomía y Negocios trabajó estrechamente con los productores locales, ofreciendo capacitaciones teóricas y prácticas que cubrieron temas fundamentales para la producción orgánica. Los temas abarcados fueron: fundamentos de la producción orgánica, buenas prácticas orgánicas, normas y regulaciones de certificación orgánica, proceso de transición de convencional a orgánico y elaboración del plan orgánico de producción.
Desde el inicio del convenio, la carrera realizó visitas a los campos de cultivos de plátano de isla con el fin de recopilar información sobre las labores culturales, los productos químicos utilizados y sus métodos de aplicación. Esto permitió brindar un asesoramiento más personalizado y beneficioso para los productores. Asimismo, se ofrecieron capacitaciones prácticas en los mismos campos.
Los resultados obtenidos en la última visita de este año fueron favorables. Gracias al plan orgánico de producción que les enseñamos a trazar, tienen sus labores culturales al día. Igualmente, se ha evidenciado una mejora en el sembrado y en el control de plagas. Comprobamos que los agricultores han aprendido a preparar y aplicar correctamente fertilizantes orgánicos, así como a identificar y tratar de manera adecuada las plantas con síntomas de enfermedad.
El logro más grande es que los productores de Mala con los que trabajamos han dejado de aplicar productos químicos, optando por abonos biológicos para la nutrición de las plantas. Esto ha dejado un impacto positivo, permitiendo producir plátano de isla de una manera ecológica, sin dañar los microorganismos del suelo ni al ambiente.
Este proyecto ha fortalecido nuestra relación con la comunidad local. Esta colaboración, gracias al convenio firmado el año pasado, continuará generando beneficios significativos para la región. Tanto nuestros estudiantes como los productores locales se benefician de esta alianza, donde la transferencia de conocimientos y el trabajo en equipo son elementos clave.
El mayor diferencial de esta iniciativa está en el notable aumento de las capacidades de producción orgánica de los productores con los que se trabajó. Gracias a esto, ellos están ahora más preparados para abordar los retos actuales de la agricultura con prácticas más sostenibles y respetuosas con el entorno natural. De esta manera, reafirmamos nuestra promesa de utilizar el conocimiento para beneficiar a la sociedad, fomentando una producción rentable, pero también ética y comprometida con el medio ambiente y la salud de las personas.